Piscis ama a todo el mundo o, al menos, lo soporta abnegadamente, siempre que el mundo le deje ir a su bola.
Es difícil que el bondadoso corazón del pez del zodiaco guarde inquina hacia alguno de sus semejantes. Por eso, no haremos la lista de las personas que Piscis detesta, sino la de aquéllos que saturan de pesar su espíritu:
1. Los que niegan o camuflan sus sentimientos, para después atreverse a criticar a quienes sí los viven y los expresan libremente.
2. Los que, directamente, no sienten la menor compasión hacia cualquier ser que sufre.
3. Los egoístas que inventan mil excusas para evitar echar una mano incluso a sus seres queridos.
4. Los que sólo obran por interés, esperando recibir un beneficio a cambio de su buena acción.
5. Los que no comprenden que soñar forma parte de la vida y censuran o hablan mal de quien se toma tiempo para explorar la realidad más allá de los cánones que dicta la lógica.
6. Los que han castrado su imaginación y consideran absurdas las ideas que se separan de sus anquilosados esquemas.
7. Los que se encierran en una rutina rígida y pretenden atrapar en ella a cuantos tienen alrededor.
8. Los que desmoralizan a quienes están tratando de levantar la cabeza.
9. Los iracundos que, llevando la mala leche por bandera, rocían a broncas a todo aquél que ose contradecirles en lo más mínimo.
10. Los críticos feroces que no tienen ningún tacto a la hora de recalcar tus errores y, también, ésos que te ponen verde hasta por la insignificancia de llorar viendo una película.
Odio no les tiene. Y, si forman parte de su familia y amigos, menos todavía. Únicamente, afligen el corazón de Piscis.
Pero, ¡ojo! Que, a fuerza de acumular aflicciones, un día el pescadito estalla y es capaz de desquitarse con todos. Avisados quedan de que no es buena idea enfadar a Piscis.
