Compatibilidad: Tauro y Leo

leotauroToca hablar de la relación entre dos signos que, a pesar de tener muchísimo en común, es frecuente que discutan: Tauro y Leo, signos de tierra y de fuego respectivamente.

Pertenecen a elementos distintos, pero son muy parecidos: leales, posesivos, dominantes, determinados y persistentes. Sus expectativas en las relaciones también coinciden: buscan seguridad y mucho afecto.

¿Cómo es entonces que discuten tanto?

Tauro y Leo en el trabajo

Tauro y Leo conforman un equipo muy creativo por la cuenta que les trae. Los dos son ambiciosos y persiguen ganancias materiales (dinerito fresco), que les ayude a darse la buena vida que tanto les gusta.

De los dos, Tauro es el que, si la cosa se pone cuesta arriba, tira del carro hasta el final. Es un trabajador incansable, disciplinado y paciente.

Leo también se esfuerza. No alcanza los asombrosos niveles de Tauro, pero bien que se apunta el tanto (el muy pillín o pillina) cuando llegan los éxitos. El primero en colgarse la medallita siempre es Leo.

Al humilde Tauro esto le importa un pimiento, porque no necesita tanto del reconocimiento público. No hay problema.

Donde sí lo hay es en el reparto de funciones. Tienen que estar clarísimas desde primera hora, porque los dos quieren mandar.

Tauro y Leo como amigos

Tauro y Leo son los amigos más leales y estables, incluso cuando no paren de discutir. Porque, sí, la probabilidad de que haya broncas monumentales es alta. Y eso que a Tauro es muy difícil verlo enfadado en serio.

La cosa es que los dos se apuntan encantados a todo lo relacionado con la palabra “placer”. Les encanta hacer el vago y visitar buenos lugares.

También coinciden en que no les gusta demasiado el cambio. Por algo son signos fijos.

Ése puede ser el punto clave: La testarudez de ambos. Tauro es el más testarudo del zodiaco. Pero el orgulloso Leo le sigue de cerca.

Cuando surgen las discusiones, ninguno de ellos quiere ceder… De ahí que se arme la marimorena.

Tauro y Leo en el amor

Los dos son románticos, amorosos, posesivos y muy leales (como hemos dicho).

Los dos, amantes del gozo ilimitado; de dormir, de la vida calmada y del sexo, al que le dan un papel mayúsculo en su relación de pareja. (De hecho, muchos de sus conflictos los saldan con un buen revolcón.)

Ambos entienden a la perfección su hambre de placer, que en los dos casos es inagotable. Y, por tanto, no tienen problema en satisfacer sus respectivas necesidades.

Entre ellas, por supuesto, también se encuentra la estabilidad y el AMOR.

A Leo le encanta sentirse admirado, adorado. Tauro es más del cariño y las muestras de afecto físicas. Tampoco tienen límites en esto y ambos saben cómo complacerse.

Visto lo visto, podrían llevarse muy bien. Pero volvemos al punto: A ninguno le gusta sentirse dominado. Tanto Leo como Tauro quieren llevar la batuta en la relación, así sea para elegir unas simples cortinas.

¡Horror! ¿Ya empiezan otra vez a discutir?

Bueno, al menos como pareja romántica, tienen el dormitorio para dar cauce a las tensiones. No está tan mal…

Conclusión: Compatibilidad regular tirando a baja, a no ser que los dos aprendan a ceder en favor del otro de tanto en tanto. Con tiempo y paciencia lo pueden lograr.

Esta compatibilidad la pidió Nina06, que ha tenido mucha paciencia esperándola. Gracias.

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