Muchas gracias por compartir esta historia y poner ese ejemplo de perseverancia tóxica, como tú la llamas. Eso para que digan que Capricornio es frío. Qué topicazos… Yo soy Leo y parezco un témpano a tu lado. Así que no podemos hacerle mucho caso a los horóscopos. Están para reírnos un ratillo, pero para nada más.

Lo que yo haría (que no es un consejo) es no perseguirlo. Si me quiere, que me busque. Y si sólo quiere cama, ya vería yo si me interesa… o no. Pero no me hagas mucho caso, Matilda. Es que yo jamás me he enamorado (ni lo haré) de una persona que no me trate bien.

Además, ya tienes claro que prefieres seguir con él (aunque sea en un tira y afloja). Sólo te deseo suerte.

La perseverancia en mi signo puede ser genial para lograr metas, pero a veces es tóxica cuando nos encaprichamos con conseguir algo cueste lo que cueste. Hace una década que persigo a un taurino. Es la relación más tóxica que haya tenido. Al principio todo iba perfecto y él me perseguía, después desapareció varios meses y, cuando volvió yo ya tenía novio. A pesar de eso volví a salir con él a tomar algo. Fue una noche horrible, en vez de tener una charla “normal” se hacía el desinteresado y cantaba en voz alta, para hacerme enojar, supongo. Luego me vuelve a invitar a otra cita en un museo. Le dije que no podía volver a verlo porque salía ya con otro chico y que no me parecía correcto. Yo buscaba algo más “a tierra”, pero me arrepentí después de eso toda mi vida porque la realidad es que no volví a sentir eso que sentía por él con ningún otro.

Luego se fue a vivir a España muchos años, nos mantuvimos en contacto por mail un breve tiempo y le hice grandes favores que jamás agradeció. Cuando volvió a mi país lo contacté por Facebook y estuve 5 meses peleando para que tomáramos un café hasta que lo conseguí. Me mandaba mensajes todo el tiempo, pero decía que no quería verme. ¿Juega conmigo? ¿Tauro juega? No me muestra interés y hablamos de nada, es todo juego de su parte y me saca de las casillas eso. Se queda hablando por chat conmigo hasta la madrugada, pero lo llamo por teléfono y no me atiende, y me dice que sólo por chat.

Le propuse vernos antes de fin de año y me dijo que SOLO EN LA CAMA. Me volvió loca cuatro días con eso, pretendiendo que yo se lo propusiera a él, dado que yo era la que quería verlo. Se lo terminé proponiendo, ya harta. Me dijo que no alcanzaba porque yo no sabía lo que quería y no le daba garantías, que necesitaba más detalles del encuentro amoroso. Y dejó de hablarme desde hace días…

Entre mi perseverancia (capricho) y su terquedad es la relación más tóxica que jamás tuve. ¿Juega conmigo? ¿Hago mal en seguirle el juego y tenerle tanta paciencia? HELP. Son 10 años y lo cierto es que un “hola” suyo me hace tan feliz, y aunque después me haga llorar de impotencia, lo cierto es que prefiero pelear con él que hacer el amor con otros. Si me propusiera matrimonio hoy mismo lo aceptaría.