Al fin, aries. Has decidido liarte la manta a la cabeza y tomarte esas merecidísimas vacaciones.
Para que sean un éxito, aquí va este puñado de indicaciones:
Desastres a evitar
1. Si es el caso, dedicar un montón de horas a ir de tienda en tienda buscando regalos para toda la familia y amigos. En caso de duda, dales el dinero y que se compren ellos lo que quieran.
2. Comprometerte para asistir a soporíferos espectáculos. Más todavía, si tienes que perder largo tiempo arreglándote y desplazándote. ¿Qué sentido tiene?
3. Viajar por lugares que no conoces o que no has investigado previamente para elegir las rutas apropiadas. Te pondrás de los nervios. La ira se apoderará de tu cuerpo. ¡Estallarás! Y, si estás en carretera, quienes viajan contigo desearían estar picando piedra antes que acompañándote.
4. Rezos interminables y películas aburridas, también descartados.
5. Enviar mensajes cuando estés enfadado. Guarda el borrador de cada uno y revísalos horas más tarde, antes de mandarlos a sus destinatarios. Quizás consideres borrar unos cuantos insultos y signos de exclamación. 😉
Lo que no puede faltar
1. Buenas tiendas online para comprar esos caprichitos que te has ganado. (Más “buenas”, cuanto más prisa se den en enviar los pedidos.)
2. Un amigo paciente y comprensivo con esos arranques temperamentales tuyos, y con quien también te puedas desahogar en caso de que algo no marche como esperas.
3. Actividades físicas, por supuesto. Necesitas canalizar ese exceso de energía y ésta es la mejor manera.
4. Tu teléfono móvil. Llévalo a todas partes. Si no lo usas para comunicarte, siempre tiene utilidad para prevenir que el pesado de turno te intercepte y te llene el día de sopor. (¡Uy! Disculpa. Me están llamando…)
5. Eventos divertidos de lo más variado: ferias, excursiones, saraos, verbenas, guateques, competiciones de saltos o concursos estrambóticos.
¡Guau! Aries, lo vas a pasar de cine y lo sabes. ¡Felices vacaciones!
