Los peores amantes de Tauro

tauroUn buen día, Tauro se confesó con su diario para recortar (aún más) la probabilidad de enredarse con ese tipo de signos que sólo le han traído dolores de cabeza hasta la fecha.

Ten cuidado con los signos de fuego.

Tauro se dejó esta nota como auto-advertencia para no colgarse de esos impulsivos y explosivos amantes. Sus relaciones con ellos fueron agotadoras y combustionaron dejando su corazón hecho cenizas.

No te fijes en los signos de aire.

señal2 capricornioTan inquietos, volátiles e inconstantes… ¿Cómo dejar su corazón a merced del viento? Tauro decidió tener también cuidado con ellos.

Pero de quienes se preocupó especialmente fue de tres signos en particular, sus peores amantes: Acuario, Géminis y Sagitario, por este orden.

Tauro y Acuario

Qué pesadilla de relación. Dos signos fijos chocando una y otra vez, hasta que se mandaron a hacer… calceta.

Tauro, tan apegado a lo suyo, se resistía a tanta novedad que Acuario se empeñaba en introducir en sus vidas. Uno insistiendo y el otro, resistiendo.

Quizás pudieron trabajar más para lograr que lo suyo saliera adelante, pero les faltaron las fuerzas.

[Compatibilidad: Tauro y Acuario]

Tauro y Géminis

Geminis, otro signo de aire, de ésos que levantan polvareda en la tranquila tierra.

Este amante no era tan terco como el anterior. El problema con Géminis es que, lo fuera o no, parecía un poco pendón.

A Tauro le costaba dar crédito a la fidelidad de un signo tan abierto y coqueto. Quizás si Tauro no se hubiese dejado dominar por los celos, otro gallo hubiera cantado.

Pero no cantó. No se acoplaron. Y la historia terminó dejando arañado el corazón de Tauro.

[Compatibilidad: Tauro y Géminis]

Tauro y Sagitario

Terrible. ¿Cómo puede entenderse Tauro, que probablemente es el signo más estable y prudente del zodiaco, con el más aventurero de todos?

Tauro, esquivando el peligro y Sagitario, corriendo hacia él, explorando hasta los más turbios rincones en defensa de su libertad.

No era plan atar al arquero a la pata de la cama. Nada que hacer.

[Compatibilidad: Tauro y Sagitario]

Y así fue como este toro demostró una vez más su prudencia: asegurándose de no tropezar más veces con los mismos astros.

Había decidido que, de ahora en adelante, mezclaría su tierra con otra tierra fértil o, quizás, formaría con el agua un sensualísimo lodo.

¿Acertó con su decisión? ¿Le fue mejor con los signos de tierra y de agua? ¿Sucumbió de nuevo al fuego y al aire? Ya nos lo contará Tauro en el próximo capítulo de su diario de amores.