El árbol es uno de los elementos representativos de la Navidad.
Su origen es muy antiguo. Fue un símbolo que utilizaron otras civilizaciones y culturas anteriores. A los cristianos les gustó, pero decidieron cambiarle su significado para celebrar el nacimiento de Jesús.
Según el significado cristiano, las manzanas (que ahora son bolas u otros adornos) simbolizan el pecado; las velas (que ahora son luces), la luz de Jesucristo y, en lo más alto, la estrella representa la fe que ha de guiar la vida del cristiano.
Más información, aquí. Como hemos dicho, hay tradiciones más antiguas con una versión diferente.
Simbolismo astrológico del árbol de Navidad
El árbol tiene forma cónica porque simboliza el zodiaco. Las bolas que se colocan serían los planetas alrededor del zodiaco.
Adoptamos la perspectiva de la tradición hindú, según la cual, el ser humano recorre varias vidas y muertes. Su alma ocupa distintos cuerpos en un largo viaje, cuyo fin es alcanzar la virtud.
Según la astrología hindú, cada signo del zodiaco posee su propia energía y virtudes características. Luego, cada persona, se reencarnaría varias veces en distintos signos del zodiaco, aprendiendo a través de cada uno de ellos y desarrollando diferentes virtudes.
Iría ascendiendo, desde la base, dibujando una espiral de reencarnaciones, hasta llegar a lo más alto: la ausencia de pecado y, con ella, la inmortalidad.
La estrella más alta simbolizaría ese estado de perfección del alma.
Espero que te haya resultado curioso, aunque sólo sea para comparar dos de las muchas tradiciones que han utilizado como símbolo este antiquísimo arbolito cónico adornado.
(Fuente)
